El Gobierno gallego estima que estas medidas beneficiarán a unos 7.000 autónomos, así como a 545 empresas.
El Gobierno gallego le dio ayer luz verde a un paquete de ayudas dirigido a los trabajadores autónomos por un importante global de 24,5 millones de euros, que se pondrá en marcha en las próximas semanas. Se trata de medidas de apoyo encaminadas a facilitar el emprendimiento, la conciliación laboral y familiar o la consolidación de la actividad iniciada por las personas que trabajan por cuenta propia. La Xunta estima que estas medidas beneficiarán a unos 7.000 autónomos, así como a 545 empresas.
Entre las nuevas líneas de apoyo destaca la creación del llamado bono de Nova Oportunidade, dotado con un millón de euros, concebido para que los autónomos que fracasaron con una actividad dispongan de otra ayuda para emprender un negocio diferente. O el bono Renova, que cuenta con otro millón de euros dirigido a facilitar el relevo generacional al frente de una determinada actividad, con ayudas que irán de los 5.000 a los 29.000 euros.
La convocatoria para la que se reservan más recursos es la destinada a impulsar el empleo por cuenta propia o la consolidación de los puestos existentes. Son 13,6 millones de euros los que se destinará a este fin, para llegar a 4.000 autónomos y 125 empresas.
El inicio de nuevas actividades será sufragado con incentivos de 2.000 euros, que llegarán a los 4.000 en el caso de personas de menos de 30 años, en riesgo de exclusión o parados de larga duración.
Contratación indefinida
Esta convocatoria incluye también ayudas para que los autónomos puedan contratar trabajadores de manera indefinida. Para el primer empleado, la subvención va de los 4.000 a los 6.500 euros. En el caso de los segundos o terceros empleados, el incentivo irá de los 6.500 a los 9.000 euros. A mayores se crea un bono de formación, dotado con 4.000 euros por persona contratada.
Las ayudas directas a quienes se dan de alta como autónomos y las que reciben quienes contraten a otras personas se incrementarán en un 25 % cuando se trate de mujeres, de emigrantes retornados, de mayores de 45 años o de personas que tengan fijada su residencia en un municipio rural.
