La caída se explica por el abaratamiento de los carburantes y una menor subida de los alimentos
Los precios dan algo de tregua en España antes del inicio de la campaña de Navidad. La inflación se ha moderado al 3,2% en noviembre gracias al abaratamiento de la gasolina, según el indicador adelantado que ha publicado este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE). La tasa, que tendrá que confirmarse en las próximas semanas, supone la primera caída interanual desde el mes de julio, cuando el índice comenzó a subir desde el 2,3% hasta llegar al 3,5% que se registró tanto en septiembre como en octubre.
La caída, de tres décimas en tasa interanual, se debe principalmente a las bajadas de los precios de los carburantes y los paquetes turísticos, mayores que las registradas en el mismo mes de 2022, según explica Estadística. También influye que el aumento de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas es menor que en noviembre del año anterior, lo que tira a la baja el indicador.
En sentido contrario destaca el descenso de los precios de la electricidad, menor que en noviembre de 2022. Esto se explica por el conocido como efecto base. El año pasado por estas fechas España registró un descenso significativo de los precios energéticos, lo que en la actualidad tiene consecuencias negativas en términos estadísticos, ya que la inflación se mide en términos interanuales al comparar cada mes con el respectivo del año previo. Por eso, aunque la energía dé tregua el impacto en la evolución del IPC es adverso.
Por su parte, la tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (un índice menos volátil por no contabilizar los alimentos no elaborados ni los productos energéticos) disminuye siete décimas, hasta el 4,5%. Esta cifra supone alcanzar unos niveles no vistos desde el mes de abril de 2022, cuando el IPC subyacente inició una preocupante senda ascendente que llevó la tasa hasta el 7,5% anual en marzo de 2023. Desde entonces, el índice que al que prestan especial atención los bancos centrales ha ido dando bandazos, en tasas cercanas al 6%.
“El dato adelantado del IPC de noviembre es una muy buena noticia. La inflación general baja 3 décimas hasta el 3,2%, ayudada por la electricidad, los carburantes y también los alimentos”, ha celebrado la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, quien también ha resaltado la evolución del IPC subyacente. “Con ello, los salarios siguen ganando poder adquisitivo y las empresas españolas competitividad aumentando su cuota de mercado, incluso en el difícil contexto internacional”.
El dato adelantado por el INE también permite hacerse una idea aproximada de cuánto subirán las pensiones el próximo año. La revalorización estará en el entorno del 3,8%, resultado de la inflación media entre diciembre de 2022 y noviembre de 2023, según la fórmula establecida en la primera fase de la reforma de pensiones aprobada en la pasada legislatura. Esta fijó que las prestaciones se revaloricen con arreglo al IPC medio de los últimos 12 meses calculado en noviembre. Por eso, para conocer la cifra exacta habrá que esperar al 14 de diciembre, cuando Estadística dará a conocer la cifra definitiva del penúltimo mes. Lo normal, no obstante, es que la variación se mantenga o que haya cambios nimios.
La tendencia hacia la moderación parece ir ganando peso en el resto de la Unión Europea. En octubre, la tasa de inflación interanual se moderó en la zona euro al 2,9%, su lectura más baja desde julio de 2021, frente a la subida de los precios del 4,3% registrada en septiembre.
Según Eurostat, en el conjunto de la Unión Europea el encarecimiento anual del coste de la vida en el décimo mes del ejercicio se alivió al 3,6% desde el 4,9% del mes anterior, la menor subida de los precios entre los Veintisiete desde septiembre de 2021.
El indicador en la eurozona se situó muy por debajo de la observada en otras grandes economías, ya que en Estados Unidos la tasa de inflación se moderó al 3,2% desde el 3,8% de septiembre, mientras que en el Reino Unido bajó al 4,6% desde el 5,7%.
