Los afectados por ERTE superan los 900.000 el mes pasado, repuntando en 160.000 respecto al cierre inicial de enero
La Seguridad Social ha aguantado en cierta manera el envite de la tercera ola de la pandemia al ganar 20.632 cotizantes en febrero, un mes en el que no siempre se genera empleo. Si bien, estas ganancias de ocupados no han podido evitar que el número de parados registrados haya experimentado un aumento de 44.436 personas, con lo que el número total de desempleados ha superado la barrera de los cuatro millones (4.008.789) por primera vez desde abril de 2016, hace casi cinco años.
Así lo indican los datos publicados hoy de los Ministerios de Trabajo y de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que también reflejan que con esta evolución del empleo, el sistema tiene una cifra media de 18.850.112 personas cotizando, lo que supone 400.117 trabajadores afiliados medios menos que hace un año (-2,08%), de los cuales 289.055 corresponden solo al sector de la hostelería.
Además el impacto de la tercera ola de la pandemia y sus restricciones a la actividad se han dejado sentir también en que en febrero volvió a aumentar el número de trabajadores afectados por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en alrededor de 160.000, respecto a los datos facilitados inicialmente del cierre de enero, terminando el mes pasado con una media de 909.661 personas. Si bien, una vez corregidos los datos de ERTE de enero, con la incorporación de todos los afectados, el dato de febrero reflejaría un leve descenso de 29.000 trabajadores, según precisa la Seguridad Social. De todos los afectados por ERTE, dos terceras partes (652.010) conllevan la exoneración de sus cotizaciones por parte de sus empresas.
Otro de los datos conocidos hoy que tampoco invita al optimismo es la caída del número de afiliados en términos desestacionalizados –una vez corregidas las variaciones estacionales y de calendario, lo que refleja mejor la tendencia del indicador– en 30.211 cotizantes, siendo el primer retroceso de este dato en los últimos ocho meses.
Según toda esta evolución, desde mayo de 2020, momento de mayor impacto de la pandemia, se habrían han recuperado 713.461 afiliados es decir, el 64% del empleo destruido entre febrero y entonces. Esto significa que aún quedan por recuperarse cuatro de cada diez puestos de trabajo arrasados por esta crisis sanitaria.
La contratación es otro de los indicadores de la posible recuperación del mercado laboral que no termina de mejorar. En febrero se realizaron 1,2 millones de contratos, lo que supuso un 7% menos que el mes anterior y un 24% menos que en el mismo mes de hace un año, cuando aún no se habían dejado sentir los efectos de la pandemia. No obstante, el mes pasado si se registró un repunte de la contratación indefinida que creció en el mes un 6% hasta registrarse 132.431 contrataciones fijas.