La viceministra económica señala que más del 64% de los trabajadores acogidos a los ERTE a finales de abril ya se han reincorporado al mercado laboral
La viceministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha defendido el papel de los ERTE en la moderación de la destrucción del empleo. Así lo ha indicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros y horas después de que se haya conocido la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre del año, que arroja una pérdida de más de un millón de empleos, el peor trimestre de la serie histórica de la EPA. No obstante, Calviño ha esgrimido que este mecanismo ha permitido hasta el momento que el 64% de los trabajadores acogidos a los expedientes a finales de abril ya se hayan reincorporado al mercado laboral, a una media de 20.000 personas por día en el mes de julio.
“Los ERTE han amortiguado el impacto del Covid-19 en el mercado de trabajo”, ha valorado la viceministra. Calviño ha destacado el “consenso de empresarios y trabajadores” para impulsar esta herramienta, que ha permitido “proteger hasta 3,4 millones de personas y más de 550.000 empresas”, ha señalado con los datos ministeriales en mano.
Durante su intervención, Calviño ha repasado el cuadro macroeconómico del Gobierno y las medidas económicas adoptada durante los meses de pandemia. La responsable de la cartera de Economía ha indicado que los afiliados a la Seguridad Social tocaron “mínimos” a finales de abril y, desde entonces, el mercado laboral ha recobrado fuerza con el citado ritmo de 20.000 personas que salen de los ERTE cada día, en línea con el mes previo.
Valoración de la EPA
Calviño también ha valorado los datos de la EPA trimestral, publicados esta mañana. “Los datos del segundo trimestre son perfectamente coherentes con la situación extraordinaria”, ha afirmado, al tiempo que ha lamentado que las peores perspectivas se concentren en el sector hostelero, el colectivo de los jóvenes y entre quienes tienen contratos temporales.
La tasa de paro nacional se situó en el 15,3%, nueve décimas más, una subida “limitada” en comparación con el descenso de la ocupación. Esta diferencia, ha explicado la también vicepresidenta tercera del Gobierno, se debe al repunte de los inactivos por las dificultades para buscar empleo durante la pandemia y el estado de alarma.
Sin embargo, la viceministra ha hecho una lectura positiva de la EPA desde tres ámbitos: la expansión del trabajo a distancia (un 16% actual frente a solo el 4% de teletrabajadores en España el año pasado); una caída de la ocupación “mucho menor a la caída del PIB” en esta coyuntura, mientras que en la crisis anterior “la destrucción del empleo fue mucho más intensa”; y el papel del cese por actividad de los autónomos, que ha visto sus frutos en esta última encuesta de empleo, “donde ha habido una caída muy limitada”, ha concluido Calviño.