España es uno de los países de Europa en el que cada empresa utiliza más software diferentes para distintas distintos temas
Los modelos de software como servicio (Saas, Software as a Service), en los que se paga por usar una determinada aplicación en lugar de tener que comprarla, es una modalidad que se impone también entre las empresas.
Según el informe “Tendencias en la contratación SaaS 2023″ elaborado por Sastrify, compañía especializada en la negociación y adquisición de software en la nube, cuando las empresas optan por pagar por uso en lugar de comprar o la suscripción (anula o mensual) los ahorros pueden ser de hasta un 65%.
Las previsiones de esta empresa apuntan a que, debido a las altas tasas de inflación que se vive en los mercados, las empresas van a optar cada vez más por estos modelos de pago por uso, con el reto de reducir los gastos.
A ello habría que añadir el hecho de que muchos de las herramientas SaaS van a subir los precios de cara al año que viene. Según datos de Gartner, estos incrementos en el precio pueden ser de hasta un 35%, lo que también estaría impulsando a las empresas a estudiar y racionalizar más sus gastos en estas partidas.
“Las compañías buscan pagar solo por aquellas herramientas que más emplean y que más valor generan: parece obvio, pero es fácil caer en dinámicas que las dirigen hacia lo contrario”, asegura David Alonso, Country Manager en España de Sastrify.
Además, la compañía advierte que, ante la incertidumbre económica, algunos proveedores de herramientas SaaS buscan retener a sus clientes mediante la firma de contratos de más larga duración. Algo que, a su juicio, puede provocar un aumento de su precio si no se lleva a cabo una buena negociación.
Eso sí, pese a estas preferencias por pagar por el uso que se hace del software y no del pago por suscripción o compra, las empresas seguirán usando estas herramientas. De hecho, el informe asegura que, de media, se usan 96 plataformas SaaS, lo que permite que este mercado esté valorado en 675.000 millones de euros el próximo año.
Además, el estudio augura que durante el año que viene habrá un aumento del número de opciones disponibles a la hora de adquirir soluciones SaaS.
La situación en España
Aunque la compañía no desglosa por países, David Alonso, Country Manager en España de Sastrify, asegura a esta redacción que sí que observan que España es uno de los países de Europa en el que cada empresa utiliza más software diferentes para distintas distintos temas. “No gastamos tanto que en Alemania porque tenemos más pymes pequeñas y se paga por usuario”, detalla, pero también que “las empresas que crecen, que pasan de startups a scale ups, a partir de 50-60-70 empleados, utilizan o gastan más software que en el resto”.
Alonso también detalla que, precisamente por este perfil de pequeña empresa, es “mucho más barato contratar un software de terceros que ya está desarrollado por los mejores desarrolladores del mundo que tener que desarrollarlo de forma interna”. Algo que hace que las pymes españolas apuesten preferentemente por estar pagar una cuota todos los meses sabiendo que la aplicación “va a funcionar perfecta y, ante cualquier duda o problema que tenga, me lo van a solucionar en horas”.
En cuanto a cuáles son las aplicaciones en modo SaaS que más se contratan por parte de las empresas españolas, Alonso asegura que las suites tipo Atlassian para desarrolladores, los CRM o las aplicaciones de Recursos Humanos (una de las que más crecimiento están experimentando) son, junto con las de infraestructura, las que más se demandan.
Cómo funciona Sastrify
Sastrify es una compañía especializada en la negociación y adquisición de software en la nube. “Ofrecemos un software propio que controla todo el resto de aplicaciones que tienen las empresas y de las que no acaban teniendo un control sobre qué gastan”, detalla Alonso. Además, esta empresa se encarga de mejorar los contratos de licencias. Aunque generalmente suele ir enfocado a mejorar las condiciones de precio, la compañía también gestiona otras opciones de mejorar las condiciones.
Sastrify cobra en función de lo que gaste cada empresa, estableciendo tres tramos. “Lo que garantizamos siempre es que vamos a conseguir ahorrar más de lo que costamos siempre. En caso de no llegar a esa cifra, pagamos la diferencia”, remarca el principal ejecutivo de la compañía en España.
Aunque la empresa cuenta con algunas alianzas con empresas que ofrecen sus aplicaciones en modo SaaS, asegura que “no nos casamos con nadie” y que son independientes a la hora de aconsejar el uso de una u otra herramienta a sus clientes.