Las empresas esquivan los augurios de recesión pero esperan una caída de facturación para iniciar 2023

  • El 50% asegura que ya ha recuperado el nivel previo a la pandemia
  • El volumen de empleo habría aumentado ligeramente en este trimestre

Las ventas en las empresas españolas han resistido mejor de lo que se pensaba la recta final de año, según recoge la encuesta del Banco de España sobre la actividad del cuarto trimestre. Pero el documento publicado hoy advierte de que las compañías anticipan una caída de la facturación para el primer trimestre del año. Además, la mitad del sector privado que colabora en el sondeo señala que ya ha recuperado los niveles de negocio previo a la pandemia.

Las empresas españolas están experimentando en el cuarto trimestre una práctica estabilización de su facturación, tras el descenso del tercer trimestre, según la encuesta del Banco de España, pero las perspectivas para el primer trimestre del año próximo son menos favorables, ya que se espera una contracción de la facturación.

En concreto, el porcentaje de encuestados cuyas ventas han disminuido para el cuarto trimestre es del 27%, unos 3 puntos porcentuales menos que en el tercer trimestre, mientras que la proporción de empresas que afirman que su facturación está aumentando ha crecido hasta el 28,4%, 3,4 puntos más que en los meses de verano.

Los datos sorprenden de manera positiva y es que se esperaba una caída de la actividad económica para el último trimestre del año, que debía abrir un período de recesión técnica. Las respuestas de las empresas van en consonancia con el buen comportamiento de los indicadores adelantados, como los PMI y datos de empleo. El Banco de España subraya el comportamiento muy favorable de los servicios de información y comunicaciones, así como la recuperación de la construcción, rama cuya facturación había mostrado una mayor debilidad en los trimestres anteriores.

Alrededor de la mitad de las empresas encuestadas indican que ya ha recuperado el nivel de actividad de finales de 2019, previo, por tanto, a la pandemia. Entre las que aún no lo han hecho, casi un tercio de ellas espera que esto suceda en 2023 (aproximadamente el 20%) o más adelante (el 13%). Finalmente, como en trimestres pasados, un porcentaje elevado de empresas (en torno al 20%) afirman percibir demasiada incertidumbre como para poder precisar la fecha de la recuperación de ese nivel de actividad.

En cuanto al mercado laboral, el volumen de empleo habría aumentado ligeramente en el trimestre en curso en las empresas encuestadas, en una magnitud similar a la que declararon hace tres meses para el tercer trimestre. Sin embargo, el incremento de la ocupación reportado ahora para el trimestre final del año contradice el descenso que las empresas esperaban en septiembre.

La proporción de sociedades que indican que la ocupación se ha mantenido estable sigue siendo mayoritaria, el 65,3% de las compañías apuntan a este escenario; mientras que el porcentaje de empresas que esperan aumentos del empleo en este trimestre (19,2%) sigue siendo mayor que el de las que esperan descensos (15,5%).

Para el primer trimestre de 2023, las perspectivas son menos favorables. En concreto, el  indicador de la evolución trimestral del empleo prevista apunta, como en el trimestre anterior, a un retroceso, que, de confirmarse, sería el primero desde comienzos de 2021. El Banco de España destaca que la evolución del trabajo mejora los indicadores de ventas de las compañías.

Los resultados muestran una leve mejora de la actividad inversora de las sociedades en el cuarto trimestre del año, período en el que aumentaron su inversión el 17,7% de las empresas (12,4% en el tercero). Por ramas de actividad, el mejor comportamiento de la inversión se concentró en ciertas ramas de servicios, como las actividades administrativas, el transporte, las actividades científicas y técnicas y la información y comunicaciones, mientras que en la agricultura, la construcción, el comercio y la hostelería la evolución fue negativa.

También hay una menor presión en los precios. Los resultados de la encuesta apuntan a una cierta moderación de la inflación. “Una mayoría muy amplia de las empresas, un 75,3% del total, manifiestan seguir experimentando, en el cuarto trimestre del año, un aumento adicional de los precios de sus inputs productivos, esta proporción es 5,5 puntos inferior a la del trimestre pasado. En las perspectivas a corto plazo, la mayor parte de las sociedades encuestada anticipa que en el primer trimestre del año próximo estas presiones inflacionistas serán similares.

En el cuarto trimestre, un 33,5% de las empresas afirman haber subido sus precios, lo que supone un pequeño descenso, de 3 puntos porcentuales, con respecto al trimestre anterior. Por ramas, esta disminución fue bastante generalizada, aunque se observó con más intensidad en la industria y en aquellas ramas de servicios, como la hostelería, que habían mostrado mayores aumentos de precios en el tercer trimestre. En cuanto a las perspectivas para el corto plazo, aumenta, hasta el 44,9%, sin embargo, la proporción de empresas que tienen la intención de elevar sus precios en el primer trimestre de 2023.

Vía: https://www.eleconomista.es